Unimos al sector pesquero y conservero para asegurar el relevo generacional

Siguiendo nuestra apuesta por la sostenibilidad, en Grupo Consorcio hemos celebrado la segunda sesión de ‘Diálogos Responsables para un futuro sostenible’. Unas jornadas de trabajo que pretenden generar un movimiento de transformación común del sector en el que participen todos los agentes implicados, y donde la sostenibilidad se ponga en el centro de la acción.

Esta segunda sesión, que ha tenido lugar el 22 de junio, ha contado con la participación del consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, Guillermo Blanco y con una decena de representantes de todos los grupos de interés involucrados en este posible cambio para el sector, entre ellos; la Directora de Pesca del Gobierno de Cantabria, Marta López; el alcalde de Santoña y director General del Grupo de Acción Costera Oriental de Cantabria, Sergio Abascal;  el presidente de la Cofradía de Pescadores de Cantabria, Miguel Fernández; el director general de la Asociación de Fabricantes de Conservas de Pescados de Cantabria (CONSESA), Ignacio Sanfilippo; la directora de RRHH de ATUNLO, María Sande; la directora ejecutiva GEM España y profesora de la Facultad de CCEE de la Universidad de Cantabria, Ana Fernández-Laviada; director de la Oficina de Calidad Alimentaria (ODECA), Fernado Mier; responsable de Empresa de España y Portugal de MSC, Alberto Garazo; el director del Centro Oceanográfico de Santander, Luis Valdés; y el cofundador y Socio de Roots for Sustainability (R4S), organización impulsora de proyectos sostenibles, Raimon Puigjaner.

“Hay que atraer a la juventud, enseñarles que se puede vivir de esto, que se puede vivir bien, que las cosas ya no son como antes, hay que fomentarles para que se decidan por estos sectores”, agregó Miguel Fernández, presidente de la Cofradía de Pescadores de Cantabria.

“Estos encuentros, a los que ya acudimos el año pasado, son muy interesantes, y por eso agradecemos que volváis a contar con nosotros, con el gobierno regional, porque para nosotros intercambiar impresiones con el sector es imprescindible”, comenzó Guillermo Blanco, consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria. Blanco añadió que “hay que primar el producto y el sello de Cantabria, las empresas que dan empleo aquí y que trabajan con el producto de aquí”.

En este sentido, Ignacio Corral, nuestro director general apuntó hacia el reconocimiento del sector y la sostenibilidad a futuro, “poniendo en valor el producto que se hace aquí, el producto artesanal, reconocer un trabajo duro, especializado, que hay que saber hacer y que aquí lo hacemos muy bien”.

En noviembre de 2020, celebramos la primera sesión del ciclo de Conversaciones responsables para un futuro sostenible, orientado a mejorar la sostenibilidad del sector pesquero y conservero de Cantabria. El objetivo de aquella primera sesión fue establecer un primer debate acerca del significado del concepto Desarrollo Sostenible en la realidad del sector e identificar retos comunes en los que “indagar y trabajar conjuntamente en las siguientes sesiones”. 

Estas sesiones de diálogo surgen como consecuencia del camino hacia la sostenibilidad que en Grupo Consorcio iniciamos hace algo más de 5 años. Una apuesta decidida por generar un impacto positivo para nuestros trabajadores y trabajadoras, nuestra comunidad y el medio ambiente por el que en 2018 obtuvimos la certificación internacional B Corp como empresa sostenible.

“En el primer encuentro del año pasado salieron ideas de las que pudimos concluir que había problemáticas que todos teníamos en común para mantener el negocio, atraer nuevo talento y poner en valor nuestros puestos de trabajo”, inició Valeria Piaggio, nuestra vicepresidenta, quien también ha concretado durante la bienvenida al acto que “la idea de las conversaciones es llegar al final del debate con conclusiones desarrolladas para llevarlas a acciones concretas, un trabajo que es necesario realizar en común, pues Consorcio es solo uno más y todos somos responsables”.

En su segundo encuentro, la mesa de debate ha trabajado sobre una de las problemáticas que se identificaron el año pasado en la primera sesión de los debates, poniendo el foco en la continuidad de los puestos de trabajo en el sector a través del relevo generacional. En un primer momento, los diálogos se han centrado en la exposición de la problemática ante la falta de relevo generacional y sus causas principales: las condiciones laborales y la empleabilidad. Raimon Puigjaner, Socio de Roots for Sustainability (R4S), organización impulsora de proyectos sostenibles a nivel nacional, encargado de liderar el encuentro, también dirigió la mesa durante las conversaciones.

Puigjaner resumió que, en cuanto a las condiciones laborales, la naturaleza de las tareas desarrolladas en los puestos de trabajo (pesca, fileteo, envasado, etc.) implica un trabajo manual duro, de amplias jornadas, horarios intensivos y dedicación completa, “lo que dificulta la conciliación personal”.

“La mayoría de los puestos de trabajo del sector no requieren un nivel de formación elevado, no obstante, son trabajos muy especialistas que requieren de unas habilidades y competencias concretas que son difícilmente adquiribles en los esquemas de formación tradicionales”, apuntó Puigjaner. De igual manera, puso el foco en que en las zonas rurales costeras hay una mayor tendencia a la emigración, “lo que lleva a su despoblación y a la dificultad de atraer talento joven, que elige salir a los centros urbanos en busca de otras oportunidades”.

En este sentido, expuso que la falta de empoderamiento de los pescadores y artesanos conserveros en la toma de decisiones de la venta de sus productos, que surge de un modelo de distribución de alimentos basado en intermediación y largas cadenas de comercialización, provocan una desligación entre la producción y el consumo. 

Además de esto, durante la mesa salió a relucir la problemática de la burocracia para las personas que quieren recibir una formación especializada en el sector, “pues existe una falta de encuentro entre ellos y la administración central”. Por ello, la solución propuesta pasa por “buscar espacios formativos que se adapten al propio sector y no al revés”.

Una de las iniciativas para fomentar esta formación específica que se ha barajado durante la sesión ha sido la de impulsar cursos que abanderen el término Learning by doing, en el que se combine el estudio en el centro educativo con el desarrollo real de la actividad profesional en el centro de trabajo. 

“Podemos aportar estabilidad desde las propias empresas, aportar estabilidad en el empleo y un conocimiento especializado del trabajo artesanal, formar nosotros, ofrecer esa posibilidad”, propuso María Sande, directora de RRHH de ATUNLO, quien también ha apuntado hacia la problemática de “cuestiones de género, pues es necesario romper ciertas barreras de género para que no haya una diferenciación entre quien va a la mar y quien se queda en la cadena de limpieza, fomentar que mujeres y hombres postulen a los mismos puestos”.